La capa amplia del árbol
la gota de fuego del semen
y las estrellas que viven como obras de aire
que nos rodean como pequeños ojos
de transparente
movimiento en la invisible selva
del deseo, la bolsa negra
en donde en aleatorio barajeo
se mueve destino y sueño
como impulsos de un ciego
amor a la vida.
amor
lenguaje y la naturaleza
el instrumento es de raíz
osadía de semilla
como esa hora patética
cuando miras al espejo
mortalmente
la palabra no es una idea,
se abre como experiencia
en el perfume de una mente,
se expande como infinita
posibilidad de flor
la hora es una hoja
sus minutos son sombras
en el suelo del bosque,
los segundos apenas pinitos
en la mugre donde obligados
nos toca descansar
la matemática de mi esperanza
es simple:
observar el trémulo de una pluma
empezar la filosofía desde la punta
de un precipicio
el abismo
es el amor
en el fondo
el recuerdo fútil
de la maravillosa
vida… acabándose.
Poesía Nihilista
las horas
una perdida
entre el asfalto
contando las líneas
blancas que en fila
hacen del segundo
una cita con el
destino
las nubes se elevan
estrepitosamente la lluvia
con granizos rompe uniforme
el pasto recién asomado de
una primavera débil visitando
cada minuto con letargo
derritiéndose como el hielo
del cielo
estudiando tu ojo
como la órbita del amor
sobre un núcleo de oscuro
desconocimiento mientras
la mente trata de encontrar
la razón de existir como
una ley inexorable
que te hinca en pasmo
eternamente
está en la capa de una cebolla
lo que ser hombre se adivina
en la noche cuando mueren
las horas de lucha esclareciendo
la verdad de que el centro no
existe, meramente ilusión
detrás de la máscara.
Poesia Moderna
poema blanco
pero me confundí
creí que los días eran
tabernas con barra libre
donde todos pasan fumando
y yo tomo mis cervezas
mientras leo el obituario
de mi pensamiento,
perdón, de veras
creí que el sufrimiento
era el pan de todos los días
del cual todos comen
pero siempre quedan con hambre,
no lo hago al propio
pero me enamoré salvajemente
del absurdo
besamos vulgarmente en público y ella
me masturba ahí mismo
haciéndome regar poemas blancos
en los pies de tu rutina
La proporción
La tengo en frente,
la abrazo con fuerza
es innegable que la tengo en mis manos.
Estoy solo en mi amor por ella
esta cosa desconocida
que solo yo conozco en mi delirio.
Lo que siento…
se escapa como la mariposa
que percibió un sonido extraño.
En la calle de al frente o cualquier otra,
un asfalto cualquiera – con este dedo
la penetro y la calle se empieza a derretir;
porque solo puedo amar aquello que se descompone
conmigo.
Y respirar – lo hago en trueque:
un respiro por cada gramo de mi ser
que se vuelve ceniza invisible.
Hoy me di cuenta que soy un hombre,
en proporción a la velocidad
de mi desaparecer.
Besando el Devenir
Si fuera posible besar por una era
una década, el cuarto de hora
perderse en la locura del olvido,
en la reencarnación del presente,
si nuestra mano alcanzara el centro
donde todo esta quieto, y el resto
gira sobre su eje, ahí hundidos
lejos de la aniquilación del tiempo.
Si un beso
como sol total
nos rescatara de esta confusión
los labios tibios de la convicción
el amor húmedo de la trascendencia
el gemido eufórico de una revolución
El beso que lo cambió todo.
Los ojos vendados con párpados
un oscuro silencio apasionado
y secos, labios malentendidos
se parten para el contacto físico
con la nada
con lo que no vive ni muere
con el vacío que nos sostiene.