Mi mirada
erróneamente
puesta sobre el juego
de las sombras sin bordes
el auto zumbando entre el humo
los cabellos que no sé a quién pertenecen
–
algo se mueve aquí como instinto de aire
algo me digiere como si estuviera
saciando el apetito del tiempo,
algo tiene los pelos de punta
y yo soy su piel,
algo acontece
y yo cedo.