Nadie
lee un poema
para calcular
cuantos minutos
le quedan por
vivir.
Nadie agarra
una estrofa
y se la amarra
como una corbata
para ir a casarse
con la luna.
Nadie
entiende que la metáfora
es un puente, sino ya
habríamos cruzado
la noche con sus mil
peces de luz.
Nadie
le abre los ojos
al verso,
para no quedarse
ciego con el fulgor
de su dolor.
Nadie
lee un poema
para no morir
sabiendo que no
sabía nada.
Me encantó! :)
nadie seria nadie si no contuviera la respiración en estas letras…Precioso amigo, un bsss silencioso :)
Sí, yo también soy de esos nadie que leen a destajo poesía. Es mi primera visita y salgo muy satisfecho con la lectura.
¡Saludos!!!